Frase extraída del artículo de Marwan Barghouti publicado
en el The New York Times, disponible online
La huelga de hambre
es una forma pacífica de resistencia, lo señaló Marwan Barghouti, parlamentario
palestino, detenido con 4 cadenas perpetuas e iniciador de la medida.
Actualmente hay más
de 6.500 presos/as políticos en las cárceles de la ocupación israelí. Se estima
que todas las familias palestinas se han visto afectadas alguna vez por la
terrible experiencia de tener a unx o varixs de sus miembros encarceladxs. Es
la tasa más alta de encarcelamiento político masivo en la historia
contemporánea. Sólo desde principios de 2017, las autoridades de la ocupación
detuvieron a 1597 palestinos/as entre los que se incluyen 311 niños menores de
18 años y 46 mujeres que son quienes más sufren las prácticas vejatorias sobre
sus cuerpos a través de acoso sexual, aislamiento, tratamiento en hospital
atadas de pies y manos, quienes están a
punto de dar a luz son llevadas al hospital encadenadas de pies y manos y una
vez que finaliza el parto nuevamente se las vuelve a encadenar.
Las demandas
legítimas de libertad y dignidad se fundamentan en el derecho internacional
consagrado en la Carta de las Naciones Unidas. Los/as presos/as palestinos/as
están privados/as de sus derechos más básicos a través de medidas punitivas y
arbitrarias que incluyen torturas, tratamiento denigrante, negligencia médica,
el establecimiento de un “apartheid judicial” como lo señala Barghouti “que
garantiza una impunidad para los israelíes que han cometido crímenes contra los
palestinos y criminaliza la presencia y resistencia palestina”.
La medida de huelga
exige la restitución de derechos como el fin de la aplicación de la prisión
preventiva mediante la cual son encerrados/as sin juicio previo y sin que se
muestren las pruebas que llevaron al encarcelamiento; las visitas de familiares
y seres queridos a quienes también se hostiga cuando concurren a las prisiones;
el fin del aislamiento y condiciones humanitarias, sobre todo las sanitarias,
de alimentación, educación y médicas, entre otras.
Desde el grupo
Tucumán por Palestina expresamos nuestra solidaridad y apoyamos a los/as presos
y presas palestinos/as, hacemos un llamamiento a poner fin a estas
arbitrariedades y que se intensifiquen las medidas de Boicot, Desinversión y
Sanción para aislar al régimen colonialista y militar de Israel que viola
permanentemente los derechos humanos del pueblo palestino.
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